Gerardo Rueda Salaberry, el tercero de los cinco hijos de Ana Salaberry
Darraidou y Andrés Rueda Benito, nació en Madrid el 23 de abril de 1926.
Políglota y licenciado en Derecho, comenzó sus estudios en el Liceo Francés
en 1942. En 1955 conoció a Fernando Zóbel, que habría de llegar a ser su
mejor amigo; con él compartió estudio en Madrid tres años después y
posteriormente también en Cuenca.
La obra de Gerardo Rueda empezó pronto a tener presencia en los
ámbitos artísticos y en 1957 expuso individualmente en la Galerie La Roue de
París. Esta muestra lo dio a conocer; el entonces director del Musée d’Art
Moderne de la Ville de Paris, Jean Cassou, compró el cuadro Composición Gris
o Balbina (1962). Su exposición individual de 1958 en el Ateneo de Madrid
tuvo una gran repercusión. Al año siguiente conoció a la pintora Carmen
Laffón, que también fue gran amiga suya. Participó en el Pabellón de España
de la XXX Bienal de Venecia con tres cuadros: Atocha (Colección Paolozzi de
Milán), Alcalá (Colección de Arte Contemporáneo, Museo Patio Herreriano de
Valladolid) y Almansa (Colección Boschi Di Stefano, Palazzo Reale de Milán).
Gerardo Rueda ayudó a Fernando Zóbel a formar una magnífica colección de
obras de artistas abstractos españoles de la posguerra y, para mostrarla,
ambos buscaron una ubicación en Toledo. Finalmente, en 1966, se
conseguiría en el Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, del que Rueda
fue fundador junto a Fernando Zóbel.
En 1965, el artista madrileño expuso algunos de sus cuadros en la
Galería Juana Mordó de Madrid, que acabó convirtiéndose en su galería, al
tiempo que entablaba una profunda amistad con la propietaria. En 1966
Gerardo Rueda recibiría el Premio Hermanos Serra, que le fue concedido por
el X Salón de Mayo de Barcelona.
En 1967 actuó como asesor de compras de obras de arte de la
Fundación Santander Central Hispano, cuya colección contribuyó a formar;
dos años más tarde participará en el XII Festival dei Due Mondi, en el Palazzo
Collicola de Spoleto. Rueda realizó en 1973 un relieve mural de granito
titulado Volumen, relieve, arquitectura, que se encuentra en el Museo de
Escultura al Aire Libre del Paseo de la Castellana de Madrid; un año después,
el artista fue incluido en el prestigioso libro de Herta Wescher La historia del
collage. Del cubismo a la actualidad. Gerardo Rueda, junto a otros artistas,
realizaría posteriormente los decorados para el programa Trazos de Televisión
Española, en 1977.
Rueda fue uno de los miembros fundadores y patrono de la Fundación
de los Amigos del Museo del Prado, que se constituyó en 1980 y para la que el
artista creó el logotipo. Este museo albergaría tres años después la exposición
Goya. Obras maestras en las colecciones madrileñas, cuyo montaje fue
igualmente obra suya. En 1989 realizaría el diseño de la edición de El Martirio
de San Bartolomé sobre la pintura de este título de Bernardo Cavallino,
también por encargo de esta fundación. El artista mantendría una estrecha
colaboración con ella y, en 1990, ofrecería una conferencia titulada “Mis
flechazos en el Prado”, organizada por Francisco Calvo Serraller.
En 1986 el artista madrileño recibiría, tras ganar el concurso convocado,
el encargo de realizar una pintura mural para la sede de la Embajada de
España en Riad, Arabia Saudí; la Semana de Música Religiosa le encomendaba
la elaboración de una placa conmemorativa de su fundación y, un año más
tarde, el diseño de su cartel y el catálogo de la XXVI Semana de Música
Religiosa. En 1987 Rueda acomete la remodelación de las salas del Museo de
Santa Cruz de Toledo para la instalación de los fondos de los siglos XVI y XVII
de la Fundación Santander Central Hispano, al tiempo que es nombrado
consejero de la Facultad de Bellas Artes de Cuenca. Desde 1986 hasta 1996
viajará por todo el mundo (Estados Unidos, América Latina y Europa) para
visitar museos junto con José Luis Rueda. Entre estos viajes cabe destacar
varios a Londres en los que visitan la National Gallery y La Batalla de San
Romano de Paolo Uccello, uno de sus cuadros preferidos, y la Tate Gallery
(actual Tate Modern), para contemplar la sala Rothko entre otras, tras lo cual
se desplazaron hasta Manchester.
Realizaron innumerables viajes a París, ciudad muy querida y vinculada
a Gerardo Rueda desde los años cincuenta y donde hicieron sabias y
placenteras visitas al Museo del Louvre, Centro Pompidou, Musée d’Orsay,
Musée Picasso, Musée d’Art Moderne de la Ville de Paris y Galerie National du
Jeu de Paume; fueron además a otras ciudades francesas como Bayona,
Toulouse, Carcasona, Grenoble y Saint Étienne, ambas con sus respectivos
museos de arte moderno, que figuraban sus predilectos por sus colecciones. A
continuación recorrieron Los Alpes y los Pirineos.
Siguieron viajes a Holanda: Amsterdam (Museo Van Gogh, Stedelijk
Museum), Otterlo (Kröller-Müller Museum, que le fascinó tanto por su
emplazamiento como por su colección), Rotterdam (Museo Boymans-Van
Beuningen) y Eindhoven.
De los viajes realizados a Latinoamérica destacan, en México, las visitas
al Museo de Arte Contemporáneo Internacional Rufino Tamayo; en una de
ellas asistió a la inauguración de la exposición Rueda, una visión - Trayectos;
Tamayo le encargó un cuadro, Casares, que se conserva en el museo. Fueron
asimismo a Monterrey, donde después de su fallecimiento se realizaría la
exposición antológica Gerardo Rueda, cuya producción e itinerario se deben al
Institut Valencià d’Art Modern (IVAM). En este continente también viajaron a
Colombia y a Venezuela, en cuya capital asistieron a la inauguración de la
muestra antológica Trayectos, que le dedicó el Museo de Arte Contemporáneo
Sofía Ímber y sería ocasión para el nacimiento de una gran amistad entre su
directora y fundadora y el artista. Dicho viaje, último en su vida a estos
lugares, concluyó en Buenos Aires con la exposición en el Museo Nacional de
Bellas Artes, que posteriormente iría a Brasil, Chile, Perú y otros lugares,
contando con la asistencia de José Luis Rueda.
Serían también importantes los viajes realizados a Estados Unidos, en
los que visitaron Dallas y el Meadows Museum, que en 1998 celebraría la
exposición antológica Gerardo Rueda, con producción e itinerancia del IVAM;
en la actualidad acoge la muestra itinerante La Escultura de Gerardo Rueda
en la Colección del IVAM. En este mismo recorrido visitaron la Nasher
Collection y posteriormente el magnífico Kimbell Museum, edificio realizado
por uno de sus arquitectos favoritos, Louis Kahn; el viaje incluyó el Fort Worth
Museum y después San Antonio para visitar el museo de dicha ciudad.
Fue muy emocionante la visita realizada a Houston para descubrir la
magnifica Menil Collection y también contemplar la Rothko Chapel y el
Obelisco roto de Barnett Newman, así como el Museo de Bellas Artes. Ya en
1995, un viaje a California se inició en Los Ángeles visitando el Museo Getty,
Los Angeles County Museum of Art, MoCA Museum of Contemporary Art,
Armand Hammer Museum of Art and Cultural Center (Gerardo Rueda. Collage,
1997), Norton Simon Museum de Pasadena, donde quedó fascinado por su
espléndida colección, y Frederick R. Weismann Museum of Art (Gerardo
Rueda, producida e itinerada por el IVAM en 1997). Acompañados por la
señora Weismann visitaron su soberbia colección de pinturas. También
visitaron con Robert Erburu su colección particular, en la que destaca su
magnífica colección de dibujos de Picasso.
Posteriormente irían a San Diego para ver su museo y contemplar el
extraordinario Bodegón del membrillo, la col, el melón y el pepino (1603) de
Juan Sánchez Cotán que posee. Ya en San Francisco y acompañados por
Madeleine H. Russell, amiga, benefactora del arte y propietaria del Bodegón
del Coliseo de Gerardo Rueda, que fue una maravillosa anfitriona,
mostrándoles su importante colección; visitaron el museo de arte integrado
en la Berkeley University y vieron en el San Francisco MoMA una exposición
de las últimas obras de De Kooning y una treintena de dibujos de Paul Klee.
Fueron también numerosas veces a Portugal para visitar diferentes
exposiciones en Lisboa, además del Museo Calouste Gulbenkian; y en Oporto,
en un entrañable viaje con Pablo López de Osaba, la Fundación Serralves.
Ambas ciudades le encantaban.
En 1988 recibirá el encargo de realizar las vidrieras para la nave central
de la catedral de Cuenca, una labor a la que se dedicaría desde 1989 hasta
1992. La década de los ochenta finalizaría con una exposición antológica
dedicada al artista, organizada por Caja Madrid con motivo de su
sesquicentenario y a la cual asistirían SS. MM. los Reyes de España, el
entonces presidente de la entidad, Jaime Terceiro, y el director de la Sala de
las Alhajas, Pablo López de Osaba.
En el año 1991, la Colección de Arte Contemporáneo Museo Patio
Herreriano de Valladolid adquirió varias de sus obras mediante la gestión de
su hijo adoptivo y heredero universal José Luis Rueda, que a partir de ese
momento se dedicaría a organizar todos los proyectos de Gerardo Rueda a
nivel nacional e internacional; dirige todos las grandes proyectos expositivos
de la obra de Rueda desde las exposiciones como Trayectos, que itineró por
toda Latinoamérica, hasta las celebradas en Estados Unidos y Europa. El
resultado de esa infatigable labor es que Gerardo Rueda ha sido uno de los
pocos artistas en el mundo que han expuesto dos veces en el Museo Nacional
Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), y en el IVAM se han dedicado nueve
producciones, entre exposiciones y catálogos, desde 1996 hasta 2008. Hay
que mencionar también como comisarios de sus exposiciones a algunos de los
más grandes historiadores de arte del mundo, como José Ramón Danvila,
Tomàs Llorens, Serge Fauchereau, Barbara Rose o Francisco Calvo Serraller.
En 1994, Juan Manuel Bonet publicó una monografía del artista titulada
Rueda en edición castellana (Polígrafa) y francesa (Cercle d’Art) y con versión
en inglés. En este mismo año, Rueda se adjudicaría, mediante concurso, la
realización de un importante relieve de chapa metálica, De construcción (550
x 800 cm), para la Comunidad de Madrid, para el cual realizó también diversos
collages como bocetos.
El 28 de marzo de 1996, el IVAM inauguraba una exposición
retrospectiva del artista, comisariada por el prestigioso historiador de arte
francés Serge Fauchereau. El 3 de abril, Gerardo Rueda sufriría su primer
derrame cerebral en Madrid, a pesar de lo cual se empeñó en viajar en coche
a Valencia para visitar la muestra, junto con José Luis Rueda. Posteriormente
sería víctima de otros dos ataques, el último de los cuales le causó la muerte
en Madrid el 25 de mayo. Un año después de su fallecimiento, su amigo el
crítico de arte francés Serge Fauchereau publicaba el libro Du collage et de
Rueda, editado por Cercle d’Art y con una versión en castellano presentada en
la Residencia de Estudiantes de Madrid. En 2001, el Museo Nacional Centro de
Arte Reina Sofía adquirió 73 obras a José Luis Rueda mediante compra y
donación. El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía presenta y edita
Gerardo Rueda, escritos y conversaciones, en 1999, y en 2003 La vida es arte
y el arte es vida, una biografía de Gerardo Rueda escrita por la prestigiosa
historiadora de arte Barbara Rose, que ya en 1996 le había citado como el
artista español más importante de su tiempo. En 2006 se presenta en el IVAM
el libro Mis flechazos en el Prado, escrito por Francisco Calvo Serraller y, como
las restantes publicaciones mencionadas, dirigida y editada por José Luis
Rueda.
La presentación de este libro coincidió también en el IVAM con la
muestra La poética de Gerardo Rueda y la tradición del arte moderno,
comisariada por José Luis Rueda y Tomàs Llorens y que constituyó un gran
éxito tanto por las importantes obras de artistas fundamentales del siglo XX
(Jean Arp, Sonia Delaunay, Lucio Fontana, Julio González, Kandinsky, Klee,
Poliakoff, Kupka, Matisse, Morandi, Barnett Newman, Ben Nicholson, Laszlo
Peri, Picasso, Reinhardt, Schwitters, Vieira da Silva, Staël, Taeuber-Arp,
Torres-García y Vantongerloo, que acompañaban la exposición de 95 obras de
Gerardo Rueda), como por la afluencia de público, que llegó a la cifra de
85.000 personas, récord en una exposición del museo.
En este mismo año también se constituyó la Fundación Gerardo Rueda,
para difundir y salvaguardar su obra; en su patronato figuran historiadores del
arte y personalidades de la cultura nacional e internacional. A partir de su
constitución se han organizado diversas exposiciones: Siglo XXI, Arte en la
Catedral de Burgos: Gerardo Rueda, albergada por la propia catedral y que
contó con 85.000 visitantes, lo cual la convierte en la exposición más visitada
de las organizadas en este entorno. Dicha muestra fue comisariada por Rafael Sierra y contenía piezas de la colección que creó Gerardo Rueda y que salían
a la luz por primera vez.
Gracias a un acuerdo entre el Ayuntamiento de Valencia y el IVAM, en
2007 se ha creado el museo de escultura denominado Gerardo Rueda: Parque
Escultórico del Turia, que acoge las obras Cubo (1970) y Rosario (1992).
Entre marzo y junio de 2007 y durante la celebración de la America’s
Cup se ha celebrado una exposición de esculturas monumentales de Gerardo
Rueda en la colección del IVAM, La poética escultórica de Gerardo Rueda,
comisariada por Consuelo Císcar, Bernardo Pinto de Almeida y Barbara Rose.
Se trata de una exposición con una itinerancia sin precedentes que supone un
importante número de visitas y que se inició en Oporto (Portugal) gracias a la
Universidad de Oporto y a la Cámara Municipal de Oporto, coincidiendo su
inauguración con un congreso de los jefes de gobierno de la Unión Europea.
De septiembre a noviembre está en la Fundación Don Luis I. Centro Cultural
de Cascais, y en febrero del 2008 irá a Nueva York, donde, gracias a la
inteligencia y generosidad del Dr. Manuel Trujillo, se presentará en el
privilegiado entorno de Park Avenue, frente al Seagram Building de Mies Van
der Rohe. Irá también a Dallas en una colaboración con la Meadows
Foundation que constituirá la segunda exposición de Gerardo Rueda en este
señero museo, caso único en un artista español; su inauguración coincidirá
con la de la plaza creada por el museo para exposiciones temporales de
escultura al aire libre del Meadows Museum.
El 1 de julio del presente año, con motivo de la reunión de los Jefes de
Gobierno de la Unión Europea y coincidiendo con la citada exposición de
esculturas monumentales de Gerardo Rueda, se inauguró en Oporto la
exposición Gerardo Rueda, modernista español, que se mostrará en dos
lugares: por un lado, las esculturas (maquetas) en la Galeria da Reitoria da
Universidade do Porto; por otro, pinturas y collages en el Museu Nacional de
Soares dos Reis. Posteriormente va a Nueva York; las esculturas (maquetas)
se exhiben en el Queen Sofia Spanish Institute y las pinturas y collages en The
Amie and Tony James Gallery, The Graduate Center The City University of New
York. El evento constituye, pues, un hito tanto en Oporto como en Nueva York.
En Nueva York, además, la exposición coincide también con la ya citada
muestra de esculturas monumentales de Gerardo Rueda. El comisariado
general y la itinerancia se deben a José Luis Rueda Jiménez y los comisarios
son Consuelo Císcar, Bernardo Pinto de Almeida, Barbara Rose y Alberto Ruiz
Gallardón. Se ha editado un importante catálogo con textos a cargo de
Consuelo Císcar, Bernardo Pinto de Almeida, Barbara Rose, Diane Kelder,
Inmaculada de Habsburgo, Manuel Trujillo, Maria João Vasconcelos y Marques
dos Santos.
Las etapas de Oporto, Valladolid y Madrid de la muestra de escultura
monumental están patrocinadas por Caja Duero Obra Social. Los textos del
catálogo son de Consuelo Císcar, José Luis Rueda, Julio Fermoso, Manuel
Trujillo, Barbara Rose, José Guirao y Fernando Capa. Con motivo de dicha
exposición, que inició su recorrido durante la America’s Cup, dio una
conferencia sobre Gerardo Rueda, artista y coleccionista el prestigioso
psiquiatra y catedrático Dr. Manuel Trujillo, que ha entrado a formar parte de
la Fundación Gerardo Rueda y está ofreciendo una nueva visión sobre la vida
y obra de Rueda.
En el prestigioso Park Avenue Bank se inaugura otra exposición de
collages de Gerardo Rueda titulada Construcciones, con comisariado y texto
de catálogo de Barbara Rose y Gerardo Rueda. También en noviembre de
2007 y en el IVAM se presentará Gerardo Rueda. El museo Imaginario, que en
enero de 2008 viajará al Museo Santa Cruz de Toledo. Estará coordinada por
José Luis Rueda y comisariada por Consuelo Císcar y presentará por primera
vez la colección formada por Gerardo Rueda con objetos y piezas de otras
culturas (inros japoneses, celadones chinos, cerámica china o tallas egipcias,
además de muebles y marcos antiguos, cristales de La Granja, etcétera) y
pinturas de Gerardo Rueda y de otros importantes artistas (Laffón, Zóbel,
Mompó, Teixidor, Guerrero, Julio González, Solana, Benjamín Palencia,
Millares, Torner, Sempere, Antonio López, Sorolla, Palazuelo, Vázquez-Díaz,
Rembrandt, Durero, Tiépolo y otros). En el IVAM se expondrán las pinturas de
estos artistas y parte de las de Rueda y en el Museo de la Ciudad los objetos,
asimismo junto con obras de Rueda. Contará con un catálogo con textos de
José Luis Rueda, Consuelo Císcar, Francisco Calvo Serraller, Bernardo Pinto de
Almeida y Manuel Trujillo, y la colaboración del historiador del arte Javier
Caballero, que ha documentado esta magnífica colección.
Barbara Rose ha publicado recientemente un fundamental artículo en la
importante revista americana Art&Antiques en el cual sitúa dicha colección
entre las cien más importantes del mundo; en un artículo publicado en la
revista Sculpture lo ensalza como uno de los escultores más importantes del
siglo XX. La prestigiosa historiadora americana lleva dedicada más de una
década al estudio de la obra de Gerardo Rueda, habiéndose convertido en
especialista en ella. También ha publicado un artículo en el número de verano
de la revista Letra Internacional. Hay que citar asimismo a José Guirao, que ha
publicado en la revista Descubrir el Arte un interesante artículo sobre la figura
y la escultura de Rueda.